Estoy en esos momentos en que no quiero decir las cosas que veraderamente me pasan porque si las digo toman otra dimensión.
Si digo quienes me importan, que es lo que me molesta y que es lo que quiero todo va a caer y no levantarse; o por lo menos esa sensación tengo.
No quiero volver a caer en esa falsedad pero a veces siento que la necesito. Me alejé de mucho demasiado rápido, es como cuando no comes nada para hacer dieta y el efecto rebote es peor; solo que el efecto rebote que hacen las personas duele más.
Hago las cosas por hacerlas, no pienso, no hablo, no cuento. Si las situaciones se quedan en mi mente, atrapadas sin salir parecen menos real.
Es un mecanismo de defensa pero no solo de autodefensa; si no que protejo mis recuerdos sobre otras personas de lo que son realmente ahora. Hay personajes de mi vida que no quiero recordar de mal manera, necesito que esten bastante puros en mis memorias; y si digo todo lo que hacen y piensan en la actualidad esos recuerdos se empañarian demasiado.
Sigo pensando que mi problema es darle demasiado vuelta a las cosas; para la mayoría de las personas que creo conocer es "dar vuelta la página"; demuestran que nada les afecta y eso es algo completamente alterante para las personas que nos exponemos tanto como yo.
Soy lo que soy, así de inestable, así de sentimental, maniática, escritora compulsiva. Soy una persona que le da mil vueltas a todo y busca sinceridad del otro lado...
Creo que esa es la clave para que esté estancada, del otro lado no hay sinceridad; nunca la hubo y eso te hace creer que nunca la habrá.
1 comentario:
"soy una persona que le da mil vueltas a todo y busca sinceridad del otro lado" me siento totalmente identificada con eso. Quizas te tendrias que rodear de otras personas
Publicar un comentario