Levantarme a las ocho de la mañana cuando me había acostado a las dos fue duro. Ducha, café y a rendir.
Cuando vi en el examen los verbos de report dije OKEY, LAGUNA MENTAL. Salir y esperar con los chicos las notas, que te llamen para "el oral" y que en su lugar te digan "Orieta quiere hablar con vos". Odio esa frase, la escuché dos veces ya. Pasé igual, es lo bueno. La mala noticia voy a un horario diferente de los chicos el cual Rachel deberá cambiar en menos de dos días.
Volver a casa con ganas de dormir y encontrarte que estaba el terremoto de tu prima. Cambiarme los zapatos super altos por ojotas, ir a comprar. Dormir. Almorzar, volver a dormir. Siesta de dos horas necesarias para que yo viva. Cambiarme y al CAEP.
Si volví al club, verlas jugar es hermoso, pero más aún verlas después de tanto tiempo. Me emocionó verlas entrar sin mi. Ver ese espacio entre el 5 de Daniela y el 7 de Martina. Hubiese llorado, algunas lágrimas cayeron, pero tenía a Rocha al lado y me contuve.
Llegar a casa a las once de la noche, destrozada. Cenar, ver The Vampire Diaries, ducha y a dormir.
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