Mi madrugada no fue otra cosa que ver las semis del Junior Master Chef Australia. No podía creer como nenes menores de doce años cocinaban mejor que yo, mucho mejor.
Entre sueños apagué el despertador y al rato escuché un "Daiiiiiiiii" a lo lejos... Quería seguir durmiendo y no comprendía por qué alguien me gritaba; mi realidad se volvía más lúcida y noté que era el tio gritando por la ventana. Miré la hora 8.24 am. OKEY Mamá se había olvidado de sacar la traba y no podían entrar al taller. La desperté, sacó la traba y yo continué durmiendo.
Las doce y media eran mi horario razonable para levantarme. Hice la cama de mamá, limpie el mini hall de entrada. Almorcé las dos porciones de pizza que habían quedado de anoche y me dispuse a ver The Vampire Diaries. Tres capítulos como correspondía.
A la tarde vino papá a seguir haciendo huecos en la pared, se ve que le divierte perforar cosas. Se llevaron el sillón AL FIN ; aunque mamá sigue en crisis por eso, amaba su sillón. Hoy bajé corriendo las escaleras y me rompí medio cuádricep, bien Daiana, duele y bastante.
La noche fue para hacer sociales. Hablé con algunas personas de las cuales no sabía nada hace meses.
Miré el repechaje del soñando, OH! Facundo, Ruben y Yana volvieron, claramente a mi me importaba que vuelva Yana solo porque es la novia de Agusto y a él lo sigo desde HSM la selección.
Después me agarró el raye de la ropa. Me probé casi todo mi placard, acomode las cosas, armé un nuevo LOOKBOOK y arreglé algunas remeras (Si, se me dio por hacer manualidades también).
Arreglamos con Gii para salir a caminar/correr en la semana. Sería bueno empezar a hacer algo además de vivir en Cuevana.
Mi cintura no puede más y la música, al menos de mi pc, debe apagarse.
Dormir, espero no engancharme con ningún programa de cocina, ni de arte, ni de moda, ni de NADA!
No hay comentarios:
Publicar un comentario